¿Quién está detrás de la clínica?
Dentistas en Valencia
Si llegaste hasta aquí, seguramente estés buscando una de estas dos cosas:
Un dentista competente y honesto
Alguien que entienda tu problema.
Tener en tu tratamiento siempre a ese mismo dentista, no uno diferente en cada cita por recambio de personal. Que te atienda con tiempo y que aclare tus dudas.
Quieres un presupuesto real, sin costes ocultos y con diferentes opciones que se adapten a tu situación económica. No quieres que desaparezcan a mitad de camino como en tantas otras cadenas dentales.
Un trabajo estético facial bien hecho
Quieres hacerte un retoque estético para lucir más bello/a, pero tienes miedo a los resultados exagerados: quieres verte natural.
Te da miedo quedar con pillow face, o con unos rasgos exagerados y poco estéticos. Sabes que hay buenos resultados y malos resultados.
Quieres ser como esas celebridades que tienen algún retoque hecho, pero casi no se nota.
Nuestra filosofía de trabajo en 4 pilares
1. La salud es belleza
Muchas cosas que socialmente consideramos bonitas son reflejo de un estilo de vida saludable.
¿Dientes blancos? Indican una buena higiene.
¿Piel luminosa? Indica una buena alimentación.
Sin embargo, en nuestra sociedad actual, es muy fácil obsesionarse con estándares imposibles de belleza. Como equipo médico tenemos la responsabilidad de cuidar la salud física y mental de nuestros pacientes. No hacemos procedimientos estéticos que consideramos excesivos, aunque nos lo pidan.
Las modas pasarán, pero la simetría natural y las proporciones armónicas serán eternamente bellas.
2. La belleza es lo más parecido a la madre naturaleza
La belleza natural no es como un filtro de Tik Tok.
¿Por qué?
Piensa en cosas naturalmente bonitas… como las flores. Aunque sean simétricas, tienen pequeños detalles que las hacen únicas. Encontrar y respetar los detalles únicos de cada persona es el mayor desafío a la hora de planificar algún cambio estético.
Con los humanos, pasa lo mismo. El abuso y la perfección excesiva genera rostros artificiales.
La magia está en los detalles.
3. Lo barato sale caro, y la calidad... se nota.
Un trabajo odontológico o estético «muy barato» es muy probablemente, un trabajo malo.
Los ejemplos sobran.
Implantes dentales
- Implantes baratos: Cuando encontramos ofertas con precios abajo de lo habitual, hay que desconfiar… porque probablemente estarán ahorrando a costas de la calidad de los materiales. El éxito de un implante se apoya en tres pilares: calidad de los materiales, técnica y mantenimiento adecuado. Si un implante falla, necesitas colocarlo de nuevo. Si la empresa cierra, buena suerte consiguiendo repuestos.
Ortodoncia invisible
- Ortodoncia invisible promocionada por influencers: Las franquicias de ortodoncia invisible tienen el problema de no tener un mismo doctor responsable por el tratamiento. Esto puede traer muchos inconvenientes al paciente. Además, corremos el riesgo de perder el proveedor en caso de quiebra.
Así podríamos seguir con cada uno de los procedimientos dentales y estéticos.
Por eso, en nuestra clínica, toda la cadena de valor está minuciosamente cuidada: desde invertir en nuestros trabajadores y su formación, hasta nuestros insumos. Podemos ahorrar en muchas cosas, jamás en calidad ni en el tiempo que dedicamos a los tratamientos.
Un trabajo bien hecho se hace sólo una vez.
Un trabajo mal hecho es una ruleta rusa.
Las cadenas dentales que crecen como una bola de nieve y luego quiebran
es una historia que conocemos muy bien en España.
4. Puedes lucir el rostro de tus sueños sin dejarte una fortuna
Nuestra misión es ofrecer tratamientos estéticos premium a todos los públicos, de manera accesible, fácil y segura.
Gracias a la revolución estética de la última década, muy pocas personas necesitan las cirugías faciales que veíamos en el pasado. Los procedimientos son cada vez más sutiles, preventivos y no invasivos. Y por supuesto, son también más baratos.
Si utilizamos inteligentemente lo que tenemos, podemos lograr grandes mejoras en la salud y en la apariencia. Nuestros pacientes se sorprenden con los resultados obtenidos incluso en los tratamientos más simples.
Nuestro recorrido
20 años se dicen rápido
Adriana Saiz
Mi pasión por la odontología y la estética comenzó cuando era niña.
Tenía tan solo 9 años, cuando llegó a mi colegio un odontólogo. Este señor me quitó una muela que no debería haberme quitado, algo bastante común en aquella época.
Esa extracción me generó una atrofia muscular, y muchos problemas en mi boca: mala oclusión, dolores articulares y un rostro asimétrico.
Lejos de desanimarme, este episodio traumático fue una enorme motivación para elegir mi carrera. Desarrollé una gran pasión por la estética, la salud y la simetría: intentando sanar a mis pacientes para que no sufran lo mismo que yo.
Vitor Nobrega
Cuando llegamos a Valencia en 2001, las prótesis dentales estaban enfocadas en la funcionalidad, pero la estética dental no tenía la importancia necesaria.
Vitor decidió formarse como técnico en prótesis dentales.
Logramos una complicidad increíble, montamos un laboratorio y cambiamos las sonrisas de cientos de personas.
20 años después, la estética dental en España avanzó a pasos agigantados. Hoy en día, trabajamos con nuevos proveedores y Vitor pudo dejar su rol en el laboratorio para convertirse en un pilar fundamental de la administración de la clínica.
Lo dicen nuestros pacientes
Nos cuentan su historia